Varios minerales y vitaminas la convierten en una superfruta, capaz de prevenir y derrotar enfermedades. Es rica en el preciado triptófano, que ayuda a combatir la depresión.
Rica en minerales como el magnesio, potasio, ácido fólico y sustancias astringentes. La banana también ofrece un elevado aporte de fibra, del tipo fruto-oligosacáridos. Es pobre en grasas y en proteínas. Además posee betacaroteno, vitaminas del grupo B –sobre todo, ácido fólico– y C y vestigios de vitamina E.
La presencia de las tres vitaminas antioxidantes (A, C y E) hace que se la considere una fruta que proporciona salud al organismo. Tiene un efecto diurética leve y es remineralizante. Es muy valiosa como fuente de energía natural y excelente para niños y deportistas, obesos y personas ansiosas la deben consumir no madura, ya que de esta manera prolonga la saciedad.
El magnesio se relaciona con el funcionamiento de intestino, nervios y músculos, formando parte de huesos y dientes, mejora la inmunidad y posee un efecto laxante suave.
El potasio es un mineral necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal. Interviene en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula y evita los calambres musculares.
El ácido fólico interviene en la producción de glóbulos rojos y blancos y la formación de anticuerpos del sistema inmunológico.
Al tener alta cantidad de potasio y poca de sodio, es beneficiosa para combatir la hipertensión arterial, ya que elimina agua y sodio del organismo.
Es un alimento rico en hidratos de carbono (3 azúcares naturales: sacarina, fructuosa y glucosa) combinados con fibra.
Su riqueza en zinc es útil para prevenir la caída y fortalecer el cabello.
Su contenido en pectina, que es mayor al de la manzana, junto con la fibra, ayudan a arrastrar el colesterol.
No aporta tantas calorías como se cree. Aproximadamente 90 calorías cada 100 g de alimento. Si la comparamos con 1 manzana mediana (150 g) es de igual cantidad de calorías, pero su saciedad es mayor, con lo cual será más valioso elegirla si la consumes no madura.
Esta fruta supernutritiva puede intervenir en la prevención de enfermedades, siempre y cuando se siga una alimentación balanceada y se realice actividad física.
Depresión: Es muy valiosa su riqueza en triptófano, un aminoácido fundamental para la liberación de serotonina (neurotransmisor que se encuentra en varias regiones del sistema nervioso central y que tiene mucho que ver con el estado de ánimo). Ese nutriente ayuda a las personas que tienen depresión a que se sientan mejor después de consumir banana.
Contiene una elevada cantidad de vitamina B, lo que ayuda a regular y tranquilizar el sistema nervioso.
Es rica en vitamina C y en fósforo, ideal para el fortalecimiento de la mente.
Auxilia a los que sufren de desórdenes alimentarios, ya que contiene un estimulante natural del buen humor: el mencionado triptófano.
En casos de inapetencia o anorexia: es una fruta muy digerible cuando es consumida madura, rica en componentes que estimulan la digestión.
En niños, un buen recurso es utilizar la banana combinada con otros alimentos en puré de frutas, crema de leche, postres, licuados con leche, para estimular el apetito.
Previene el estrés: El potasio es un mineral vital, que ayuda a normalizar el ritmo cardíaco llevando oxígeno al cerebro. Además, regula el equilibrio de agua en el organismo. Cuando estamos estresados, el ritmo metabólico se eleva, reduciendo nuestros niveles de potasio. Esto puede ser balanceado comiendo una banana.
Contiene vitamina B6: Regula los niveles de glucosa en sangre mejorando el humor.
Los que dejaron de fumar: La banana puede ayudarlos por sus elevados niveles de vitaminas C, B6 y B12, además del potasio y del magnesio que contienen, ayudando al cuerpo a recuperarse de los efectos del síndrome de abstinencia.
Prevención de úlcera gástrica: por su efecto antiácido natural en el organismo, cuando se la consume madura y sin los hilos, es fácilmente digerible.
Contra la gastritis: Puede ayudar en los tratamientos para combatir la gastritis. También puede utilizarse para la cicatrización de las mismas. Para que esto sea efectivo se considera que las bananas tienen que ser de las variedades de tamaño grandes, que sirven para cocinar y que tienen que estar verdes.
En casos diarreicos: Es rica en taninos, que pueden tener un valor astringente.
En personas mayores y estudiantes: En las personas mayores ayuda a retrasar problemas de senilidad. En los estudiantes, aumenta la memoria, y es útil especialmente en épocas de exámenes.
Por estas propiedades y por otras tantas, te recomiendo que consumas 1 banana no madura (si no tenés gastritis) diariamente. Y en caso que tengas alguna sintomatología digestiva, consumila madura y sin hilos.