La dieta keto es por definición aquella que induce la cetosis reduciendo la ingesta de hidratos de carbono al máximo.

Por esta razón, la dieta keto no es una dieta reducida en hidratos sino muy baja en este nutriente, ya que no se deben superar el 10% de las calorías diarias y hay propuestas extremas en que la proporción de hidratos no alcanza el 1% de la energía del día.

A diferencia de la dieta paleo, en la dieta keto se prohíben no sólo cereales y legumbres sino también la gran e inmensa mayoría de las frutas y verduras.

Asimismo, en las dietas keto hay determinados procesados como los cárnicos que están admitidos, ya que no contienen hidratos de carbono (o al menos no en cantidades significativas).

Por su parte la dieta paleo es más flexible y sostenible en el tiempo, no requiere el control tan estricto que sí se necesita en cetosis y lo mejor, es apta para comer en sociedad.

Si tenemos que perder muchos kilos y requerimos de un proceso largo, lo más recomendable será una dieta reducida en hidratos pero más sostenible como es la dieta paleo, mientras que si buscamos quemar un poco de grasas para deshacernos de unos kilos o la dieta keto puede ser la más apropiada.

Ya vemos que dieta paleo y dieta keto no son iguales, pero ambas pueden ser de utilidad exceptuando casos sin control que pueden perjudicar la salud.